Marca Personal Digital: ¿qué es y cómo gestionarla?
¿Haz escuchado del término marca personal? Diariamente, estamos expuestos a diferentes marcas y a su constante bombardeo que busca la atención y el reconocimiento de los usuarios y consumidores. Algunas de ellas pueden ser reconocidas fácilmente con tan solo un olor, una imagen o símbolo.
Nos evoca confianza, un lugar agradable donde seguramente compartiste alguna experiencia mientras disfrutabas de alguna comida, postre o bebida. Otras estimulan tus sentidos y te hacen parte de una cultura colectiva, a veces incluso de forma inconsciente.
Si ese ha sido tu caso, has estado expuesto a la intensa maquinaria de las grandes empresas que buscan posicionarse en el mercado y procuran que no te olvides de su marca. Eso es una marca comercial o corporativa.
Dicho esto, entonces te preguntarás qué es entonces la marca personal. Te invitamos a seguir leyendo para que conozcas la respuesta en las siguientes líneas.
Marca personal
Imagina trasladar la experiencia que te describimos con anterioridad a una persona. Ese es el comienzo de la construcción de lo que se conoce como marca personal.
Una marca personal es la forma en cómo te proyectas hacia el exterior y cómo las personas te perciben en consecuencia. Dicho de forma más simple, y con las palabras del fundador de Amazon, Jeff Bezos: ¨marca personal es lo que otros dicen de ti cuando no estás en la sala¨.
Este concepto es sumamente explotado por artistas y profesionales de distintas ramas que desean destacarse. De hecho, es una labor exige una estrategia sólida y ejecución constante para obtener resultados tangibles.
¿Por qué es importante cuidar tu marca personal?
Todo por lo que tanto has trabajado puede verse afectado por alguna acción que realices que, sin darte cuenta, vaya en contra de los creencias, principios o expectativas de tu audiencia objetivo.
Tu audiencia ve en ti un ejemplo a seguir, y, por tanto, tu accionar debe estar siempre enmarcado dentro de la filosofía que tú mismo les has inculcado desde tu salto como un producto. Por eso aquí es importante aclarar lo siguiente:
- Eres una persona, un individuo, pero tu yo físico es distinto a tu yo comercial. Eso sí, ambos son inseparables, porque sin tu yo físico lo comercial simplemente no existe.
- En tanto, tu yo comercial es todo aquello que te genera ingresos y beneficios acorde con tus objetivos. Tu yo físico es el vehículo.
Aunque los dos habitan el mismo cuerpo, la percepción como marca siendo tú un humano, debe ser trabajada y trasladada a la mente de tu audiencia diariamente sin que esto entorpezca tus relaciones personales y familiares.
Recuerda, tu yo comercial es lo que vendes.
Partiendo de esa aclaratoria, el cuidado de tu marca personal debe estar sujeto a estándares basados en una estrategia y acciones conforme a cada objetivo que te has trazado.
¿Cómo gestionar tu marca personal?
Para que las personas te reconozcan como tal, tienes que ir por ellas y mostrarles lo que eres, lo que haces y, principalmente, cómo puedes ayudarlos.
¿Cómo lo logras? ¡Haciendo networking!
La mejor manera de relacionarse con otros es asistir y ser parte de reuniones, conferencias, conversatorios… Son esos espacios donde se fomentan las conexiones con las personas que buscas establecer un vínculo comercial.
Este networking puedes hacerlo de forma física, pero la misma experiencia puedes trasladarla a las redes sociales. Estos canales digitales son muy aprovechados por aquellos profesionales que se dedican brindar asesorías o mentorías en diferentes ámbitos.
La constancia en las redes sociales, cuando el contenido en verdad aporta algo más al usuario, ayuda a las marcas personales a ganar una gran notoriedad.
Las relaciones que mantienes con otros puedes construirla también aplicando otras tácticas de comunicación, como por ejemplo, siendo participante en entrevistas en medios masivos o trabajando en conjunto con organizaciones en pro de alguna causa.
Pero en concreto, para posicionar tu marca y lograr que el resto de las personas la recuerde, debes construirla siguiendo estos tres pilares fundamentales.
- Tu diferencia frente a la competencia, mejor conocida como ventaja competitiva.
- Nivel de visibilidad. Debes enfocarte en estar presente en donde está tu público objetivo.
- Posicionamiento del mensaje que quieres transmitir. No se trata de comunicar por comunicar, tu mensaje debe ser contundente y corresponder con tus objetivos de marca.
Los errores que deberás evitar
No ser auténtico
¿Te has dado cuenta de que hoy en día muchas personas hacen o son expertos en lo mismo? Dejar de ser tú mismo puede ser fatal para tu marca personal en crecimiento.
Si haces algo que es similar a lo que otros ofrecen, ¿qué harás? ¿Te quedas de brazos cruzados o piensas una táctica para vender mejor?
Si has elegido vender mejor, procura que las acciones que realices a continuación vayan encaminadas en conseguir un nivel diferencial aceptable frente a tu audiencia, que no implique sacrificar tu personalidad, lo que eres y lo que piensas.
Autenticidad, es lo tendrás que emplear si quieres que las personas crean en ti.
Olvidarte de tu rumbo trazado
Es fácil olvidar aquello que planificaste con tanto fervor cuando se está en el desarrollo de una marca personal. No te culpes, muchas personas van improvisando sobre la marcha, pero te recomendamos que este no sea tu caso.
Sé alguien que transmita serenidad y carácter, pero también sé quién controla cada paso que das, recuerda que la coherencia es fundamental.
Vivir en el ayer
Si has fracasado en algo antes, déjalo ir. Eres tú en el ahora, no en el ayer. La reinvención diaria es importante y la intranquilidad por un día perdido debe ser tu caldo de motivación para trazarte nuevas estrategias y nuevas ideas.
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